Era y aún es, en muchos países de oriente, costumbre hacer grabar la firma en un sello. Esto permite simplificar la firma de documentos, de manera de ahorrar tiempo en la confección de laboriosos y complicados ideogramas. Por ejemplo, en Japón, existe un registro donde cada ciudadano lleva su sello y lo inscribe y a partir de allí este sello tiene valor legal y a todos los efectos es como la firma del propietario.
Esta costumbre viene de siglos, como en todo objeto de uso personal, el deseo de refinamiento y de elegancia se fue en estos objetos perfeccionando y se construyeron sellos y objetos relacionados al uso de los mismos en los que se emplearon materiales considerados de lujo que ayudaban a mostrar la riqueza o buen gusto del propietario. Dentro de los accesorios necesarios al uso de los sellos, se encontraba la tinta. Esta tinta es una pasta que se humedece ligeramente y sobre la que se coloca el sello antes de posarlo en el papel. Y, para llevar la tinta se crearon recipientes en forma de cajas, algunas de ellas en marfil, que son las que nos interesan y que presento aquí.
1. Esta primera caja que presento tiene grabados policromados que representan a un gallo y cuatro insectos. Los insectos se encuentran en un caso junto al gallo; dos de ellos en la parte interior de la caja y el último en la parte posterior. Este trabajo nos muestra la importancia que se le daba a estos recipientes pues el grabado y coloreado de esta decoración ha sido realizada con una enorme paciencia y dedicación de parte de algún anónimo artesano.
2. En este caso presentamos uno de estos contenedores hecho en marfil y con dibujos que representan leones, el león central está tallado en relieve, mientras que los que lo rodean son grabados. En todos los casos se han teñido con las técnicas que se utilizaban en Japón a fines del Meiji principios del Taisho. La pieza, como decía de origen Japonés, es rastreable y perteneció a una personalidad uruguaya de principios del siglo XX. Mide 6.5 cm de diámetro y casi 4 cm de alto.
3. Esta caja es otro de esos recipientes y en este caso la tapa se encuentra tallada en profundidad creando relieves en lo que es un grupo compuesto por flores (crisantemos a mi entender) y hojas que se superponen. La pieza mide 6.5 cm de diámetro por 4 cm. de alto.
4.- Una caja con una decoración de monos. Probablemente un nihon saru que es el mono traicional del Japón. La caja, mide 6.5 cm de diámetro por 3 cm de alto lo que la hace algo más baja que las anteriores. Sin embargo corresponde al uso de cajas para tinta de sellos.
5.- Esta caja tiene un dragón tallado en su parte superior. No logro ver la tercera garra al dragón lo que confirmaría su origen Japonés... Independientemente del origen, es sin duda una caja para tinta de sellos. Su medida, casi estándar en estas piezas es de 6.5 cm de diámetro.
6.- Otra caja para tinta de sellos, en este caso también con un dragón tallado en la tapa. La pieza mide 6.8 cm de diámetro.